*FALTAN 9 DÍAS PARA EL VIAJE*
Los niños y las niñas de 4 años nos hemos puesto manos a la obra en la realización de juegos para enviar a los niños y las niñas de Tanguiéta. Con estos juegos tan divertidos que hemos hecho con muchísimos cariño para ellos, pretendemos no solamente que se diviertan, sino también que desarrollen, de manera implícita, habilidades y capacidades.
¿Queréis ver qué hemos hecho?
¡Adelante!
¡Adelante!
Dominó
El primer juego que hemos elaborado fue un domino. Mejor dicho: ¡hicimos tres! Uno por cada clase. De esta forma, una clase se encargó de un dominó basado en personajes de cuentos de hadas, ya que sabemos que a los niños y las niñas de Tanguiéta les encanta. Otra clase hizo un dominó de formas geométricas, y la otra, uno de vocales.
Después de haberlos plastificado, pasamos un rato muy agradable jugando con ellos y decidiendo en dónde iba cada pieza.
Después de haberlos plastificado, pasamos un rato muy agradable jugando con ellos y decidiendo en dónde iba cada pieza.
¡Qué bien lo hemos pasado haciéndolo!
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Tres en raya
El segundo juego que elaboramos fue varios tres en raya un tanto peculiares. Hicimos tres tableros; en cada uno de ellos dibujamos algunas de nuestras manos y, dentro de ellas, coloreamos varios dibujos: flores, soles y besos. Después de darle color a estos maravillosos soportes, fuimos directos a decorar las fichas, las cuales estaban relacionadas con cada tablero.
En el tablero de flores coloreamos 5 dibujos de abejas y 5 de mariposas; en el de soles, 5 nubes grises y 5 azules; y en el de besos, 5 corazones azules y 5 rojos. Dichos dibujos los plastificamos y lo pegamos encima de unos tapones. ¡El resultado es espectacular!
En el tablero de flores coloreamos 5 dibujos de abejas y 5 de mariposas; en el de soles, 5 nubes grises y 5 azules; y en el de besos, 5 corazones azules y 5 rojos. Dichos dibujos los plastificamos y lo pegamos encima de unos tapones. ¡El resultado es espectacular!
¡Cuánto hemos trabajado!
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Memory
El tercer juego fue un tanto peculiar. Un día, nuestras profes nos propusieron disfrazarnos y pintarnos la cara para convertirnos en diferentes personajes y así elaborar un juego muy divertido que tanto a nosotros como a los niños de Tanguiéta les iba a resultar gracioso.
Y... por arte de magia, ¡nos convertimos en parte de un memory!
Y... por arte de magia, ¡nos convertimos en parte de un memory!
Nos sorprendimos un montón al vernos convertidos en superhéroes, trabajadores, princesas, animales y personajes de cuentos. No podíamos parar de reírnos mientras jugábamos. Ya veréis qué bien se lo van a pasar en Tanguiéta.
¿Queréis vernos en acción?